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Islas Cíes: el paraíso secreto de Galicia y por qué tienes que visitarlo

Si te pedimos que pienses en playas de arena blanca, aguas turquesas y naturaleza indomable, probablemente tu mente viaje al Caribe o a algún rincón remoto del Pacífico. Pero os diremos un secreto: uno de los paraísos naturales más impresionantes de Europa se esconde a la entrada de la ría de Vigo, en Galicia. Hablamos de las Islas Cíes.

Este archipiélago, compuesto por las islas de Monteagudo, do Faro y San Martiño, no es un destino de playa más. Es una joya de la corona gallega, parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia, un santuario protegido con un permiso de acceso limitado que lo convierte en un destino exclusivo.

Islas Cíes. Foto: Gervasio Ruiz

El secreto mejor guardado de las islas: la playa de Rodas 

Muchos lo confirman: la playa de Rodas es una de las playas más bellas del mundo. Esta lengua de arena fina une las islas de Monteagudo y do Faro, creando un paisaje visualmente hipnótico. A un lado, el mar abierto, y al otro, una tranquila laguna interior.

Aquí las aguas son de una transparencia asombrosa, aunque no os engañaremos, ¡son aguas atlánticas y están bastante frescas! La inmensidad de esta playa, unida a la restricción de visitantes diarios, te regala una sensación de paz y privilegio inigualable.

Playa de Rodas, una de las más famosas de las Islas Cíes. Foto: Gervasio Ruiz.

Qué hacer en las Islas Cíes en uno o dos días 

Las Islas Cíes son un lugar especial para visitar y realizar actividades relacionadas con su patrimonio natural y cultural. Te proponemos algunas de las excursiones más interesantes que podrás hacer:

Las playas

Además de la playa de Rodas, puedes visitar otras playas tan espectaculares como la de Nuestra Señora, la de Bolos o de Conchas y la de Figueiras.

Las rutas y actividades

Si visitas las Islas Cíes y te apetece hacer una ruta de senderismo, las islas te ofrecen de diferente variedad, distancia y dureza, aunque la mayoría son perfectamente accesibles.

Las 4 rutas más conocidas son, la del Faro de Cíes (6,7 km ida y vuelta), el Alto do Príncipe (3,2 km ida y vuelta), el Faro da Porta (5,4 km ida y vuelta) y el Faro do Peito (4,8 km ida y vuelta).

Realiza actividades como snorkel o buceo para ver la vida marina, o alquila un kayak para disfrutar las islas desde el mar, una actividad totalmente recomendada.

El centro de visitantes

El edificio del centro de visitantes de las Islas Cíes se ubica en el interior del antiguo Monasterio de Santo Estevo, una casona de piedra del siglo XI. El centro se ubica en la ruta hacia el Faro de Cíes. Está abierto por las tardes durante la temporada alta.

Islas Cíes. Foto: Iria González Sierra

Un santuario de vida salvaje y candidato UNESCO

El verdadero valor de las Cíes reside en la biodiversidad de su ecosistema único. Son un refugio imprescindible para miles de aves marinas, lo que le valió la designación como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).

Las Cíes albergan una de las mayores colonias de gaviota patiamarilla de Europa, junto con el cormorán moñudo y el paíño europeo. Observarlas supone un espectáculo por sí mismo, por lo que el avistamiento de aves puede ser una actividad obligatoria para todo visitante. Así que si eres amante de los animales o del senderismo ornitológico, los acantilados son el lugar perfecto para verlas en su entorno natural.

De hecho, la relevancia ecológica de este espacio es tal que las Islas Cíes están inmersas en un proceso para ser declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, un reconocimiento que blindaría aún más su conservación. Puedes conocer todos los detalles sobre su protección y valores naturales en la web oficial del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia.

Planifica tu escapada: cómo llegar y pernoctar en las Islas Cíes

Visitar las Islas Cíes requiere planificación, especialmente en temporada alta (verano y Semana Santa), ya que el acceso está limitado a un cupo diario para proteger el frágil ecosistema.

  1. Autorización: en primer lugar, debes solicitar una autorización de la Xunta de Galicia. En verano, esta gestión suele estar integrada en la compra del billete de barco o en la reserva del camping.
  2. Transporte: el acceso solo es posible en ferry desde los puertos de Vigo, Cangas o Baiona.
  3. Alojamiento: si quieres extender tu estancia de un solo día (lo cual recomendamos totalmente), solo existe una opción: el Camping Illas Cíes. Pernoctar te permite disfrutar del archipiélago en un silencio mágico cuando el último ferry se ha ido. Es aconsejable reservar con antelación ya que las plazas son limitadas.
Islas Cíes. Foto: Ignacio Ruiz

Para facilitarte la organización, existen opciones que incluyen la gestión del permiso y el transporte en un solo paquete. Una de las más cómodas es la excursión a las Islas Cíes en velero desde Vigo, una manera espectacular de vivir la experiencia atlántica desde la ría.

Las Cíes no son solo un destino, son una experiencia de desconexión radical. Un lugar donde la naturaleza manda, te obliga a reducir la velocidad y te regala la visión de atardeceres sobre el océano que te dejarán sin aliento. 

¿A quién llevarías a este lugar? Compártelo con esa persona.

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